Otro puñado de políticos independentistas catalanes han pasado estas dos últimas noches en la cárcel. Y apunta a que van para un rato. Una más ha salido de España para eludir a la Justicia.
Y no hay nadie hablando.
La crisis política más grave que se ha vivido en España desde la muerte del dictador se está resolviendo en los tribunales, a golpe de auto.
Rajoy gana.
Ya quedó establecido que se trata del único animalito del bosque que, sin necesidad de moverse, avanza. (Lo dijo Iñaki Gabilondo en uno de sus post multimedia en los que siempre la clava). Y ya “causa estado”; no se discute: sin necesidad de moverse, avanza.
El coste parece no importarle a nadie. En este caso el coste es España.
A Rajoy no le interesa el diálogo, no le interesa el pacto, no le interesa la solución política de este problema que es exclusivamente político. Rajoy quiere rendición. Ya le ha pasado más veces. Rendición. Con ello rinde culto a su parroquia. Nada que negociar. Ninguna concesión que hacer.
A Rajoy le interesa el enorme rédito electoral que le proporcionan estas decisiones judiciales que le llegan (¡oh grandeza de los calendarios!) cuando el Partido Popular vive sus horas más bajas atenazado por la corrupción, por Ciudadanos, por su inmensa minoría parlamentaria, por la incapacidad para la negociación de los presupuestos…
Su estrategia: resucitar el nacionalismo españolista que creíamos felizmente acorralado en un reducto ínfimo de señoras y señores muy de derechas. Y resucita a mayor gloria de Mariano Rajoy, envuelto en banderas constitucionales y blandiendo amenazante papeletas del PP para las próximas 100 contiendas.
El nacionalismo catalán, al que hemos visto crecer y multiplicarse ante nuestros propios ojos, se enfebrece y clama. Burla a la Justicia, sortea las leyes, juega al no gobierno mientras los dueños del 155 manejan las instituciones antes autónomas de Cataluña. Una declaración institucional que no representa a la Institución, llama al movimiento por la salvaguarda de los derechos humanos.
Ya me sé lo de la separación de poderes, pero insisto (sé que me repito) en que el Estado es trino, pero uno. Y sus tres personas se hablan, se miran, se complementan, recorren como uno solo, el propio Estado, ese mismo camino al que, hasta aquí, conocíamos con el nombre de “bien común”.
Cinco políticos más en la cárcel y otra más huida no contribuyen en alcanzar solución alguna. Más bien sucede todo lo contrario.
Pero esto al Gran Mariano le importa un carajo. Él quiere derrota. Y va a ganar esta batalla.
Apostamos sobre el final de este episodio fatal: El gobierno de Ciudadanos amnistía a los condenados del Procés cuando, dentro de ocho o diez años, el asunto se crea olvidado. Un gobierno de gelatina mandando en Cataluña. Medio pueblo catalán odiando al resto del pueblo español. La mitad del resto del pueblo español odiando a esa misma mitad del pueblo catalán. Medio pueblo catalán odiando a la otra mitad de su propio pueblo que, a su vez, los odia a ellos. Y un grupo encastillado de nacionalistas recalcitrantes insistiendo en no reconocer otra república que la catalana para volver a empezar desde cero. En ocho o diez años. Política 0, Mariano 1, aunque le valga para muy poco esta victoria, porque será solo de una batalla y no de su guerra.
Pero esto será después. Hoy lo que importa es que cinco compatriotas más están en presidio, por haber creído en una idea y haberla defendido a costa de la legalidad vigente. No conduce a nada, pero delinquieron y la paz jurídica así lo exige. Rendición. Mariano 1, España 0.
Cinco nuevos políticos independentistas catalanes llevan dos noches durmiendo en la cárcel. La política no ha servido para nada. Hablan los autos.
Pensaba por aquí 
Cuando se pretende conseguir algunas ideas que rompen con las leyes establecidas el riesgo es acabar en la carcel , pienso que se debe debatir las intenciones de cada cual sin perjudicar al resto de españoles , por qué de una manera o de otra todos contribuimos para bien o para mal con el destino de nuestro país , cierto que esta batalla que nos afecta a todos se la van a servir en bandeja a marianico le a tocado y no se si estoy bien enterado pero los encarcelados y los fugados lo son por saltarse las leyes esas son las consecuencias para unos y las ventajas para otros .
Feliz domingo de invierno primavera.
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Una vez más, de acuerdo contigo. Pero hoy no del todo.
No me cabe ninguna duda de que encarcelados y fugados lo son por sus propios méritos. Estoy seguro de que no se trata, ni mucho menos, de presos políticos y de que unos y otros conocían perfectamente las consecuencias de sus actos, igual que que casi todo el mundo sabe que saltarse la ley a la torera acarrea lo que acarrea.
Sin embargo, creo que la dejación de funciones que está haciendo el Gobierno de España, dejando toda la tarea a los tribunales es una puta barbaridad. Rajoy sabe que esta actitud le da votos (y no pocos) y deja que otros vayan tomando las decisiones que solo, en realidad, le corresponden a él. Porque, a mi juicio, y a pesar de que el separatismo catalán ha roto todas las reglas de convivencia, el problema es sustancialmente político. Y la responsabilidad de que las cosas no hubieran llegado hasta aquí es, a partes iguales, de los dos actores en conflicto.
La manía de no hacer nada (nada para arreglar el conflicto y todo para recrudecerlo) y dejar pasar el tiempo hasta ver pasar por su puerta el cadáver de su enemigo nos va a salir muy cara, porque lo que se está rompiendo era una cosa demasiado valiosa.
Y, sí, es verdad: se lo han ganado a pulso. Pero no ha ganado el Estado con la aplicación del Código Penal. Solo ha ganado Rajoy.
Muchísimas gracias, Juan Carlos. Nada más saludable que esto de no estar de acuerdo. Es la única manera de ayudar a formar la opinión.
Abrazos y Abrazos.
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Estimado Justo. Siempre te sigo en este blog y me congratula saber q aun queda en España personas con juicio. No soy muy de andar comentando en las redes sociales pero en esta ocasión creo q es necesario q alguien se oponga firmemente a la opiniónq de los grandes medios y q la gente digiere y acepta sin el mas minimo sentido crítico.
Alguien en Catalunya se ha saltado las normas claro. Como muchos hicieron e hicimos para acabar con el franquismo. En segundo lugar incumplir las normas no siempre significa q deba acabarse en la carcel. Nadie va a la carcel por aparcar mal el coche, por ejemplo. Menos aun cuando nadie ha sido condenado. Nuestros presos políticos lo estan preventivamente. Nadie ha probado aun que hayan cometido ningun delito.
Alguien se ha preguntado como es posible que estos peligrosos delincuentes q encarcelamos en España son invitados en Europas por universidades y organismos internacionales a dar conferencias y participar en seminarios?????????
Puede ser q en España nadie entienda que los conflictos políticos con un solido apoyo democrático poe ambas partes se areglan mediante el diálogo y la negociciación (Canada, Gran Bretaña, etc.)
Alguien sabe q en Catalunya están proceados o invistigadas centeneres de personas por supuestos delitos como un profesor que en clase debatió con sus alumnos lo q pasaba en Catalunya o un mecánico q no quiso reparar el coche de un guardia civil??????
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¡¡¡Hola!!!
Mil gracias por romper tu tradición de no comentar mucho en las redes y poner aquí tu opinión sobre este asunto.
Consideras que los del «Procés» son presos políticos, por su condición de preventivos, y valoras la consideración que están teniendo a nivel internacional.
Yo no estoy totalmente de acuerdo, aunque me relaja mucho (mucho) leer una opinión como la tuya porque, si bien sí considero que hay o puede haber uno o varios delitos, creo que la prisión incondicional, no eludible bajo fianza, es simplemente una exageración que a nadie beneficia. Convendrás conmigo, no obstante, en que aparcar mal el coche no es exactamente lo mismo que declarar la independencia de un territorio…
Sí que coincido totalmente en que todos nos hemos saltado las normas cuando estas eran insoportables y estábamos seguros de que teníamos que terminar con un régimen político, seguridad esta que sin duda tienen los independentistas catalanes en este momento. Por eso alguna vez he dicho que la legalidad vigente puede no ser inalterable (de hecho nunca lo es) y que a la luz de una legalidad distinta los hoy encarcelados podrían ser héroes y no villanos.
Desde luego, completamente de acuerdo con la afirmación de que los conflictos políticos ( y este es un conflicto político y no penal) se arreglan mediante el diálogo y la negociación, aún más si las partes tienen, como es el caso, ese sólido apoyo democrático al que te refieres.
La actitud del Gobierno de Rajoy de negarse a cualquier tipo de diálogo y escudarse en el Código Penal para resolver el conflicto es, desde mi punto de vista, una traición altamente antipatriótica a los intereses de España.
La otra realidad que comentas, esos centenares de personas procesadas o investigadas por supuestos delitos relacionados con el independentismo, es aterradora. El Estado imponiendo su «verdad» valiéndose del miedo a una sociedad que en una parte importantísima está tratando de hacer valer su derecho a decidir. Aterrador.
Solo gana Rajoy. Cada vez lo veo más claro. Escondido detrás de los jueces y cosechando los votos de todos los que no quieren escuchar más verdad que la suya.
Muchísimas gracias, Luis. A lo mejor nos tenemos que replantear alguna cosa y volver a escuchar a los que dicen que, realmente, se trata de presos políticos. Aunque yo, hasta aquí, no esté de acuerdo.
¡Un abrazo enorme!
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Una premisa, no creo que estemos hablando de presos políticos, el alcance de sus actos no se les podía escapar en un estado democrático.
Dicho esto, de nada sirve al futuro esta nueva vuelta de tuerca. En este momento sólo para cargar de razones a unos y otros de los situados en los extremos. Extremos a los que no les preocupan ni las consecuencias ni la fractura social que dejan como herencia.
Quizás el error conceptual sea no querer entender que, en un estado democrático, necesariamente, es necesaria la armonía entre los tres pilares del Estado, cuándo está no existe sólo queda el “poder” en estado puro y es ahí dónde nos rechina en nuestras convicciones democracia o de concepción de las libertades.
No existe, en este momento acción política y eso desnuda al resto de pilares del estado. No hay diálogo, no hay, seguramente no se quiere que haya, caminos de acercamiento y por tanto sólo la crudeza de la aplicación de la ley.
Si eso es así, todos sabemos quién gana.
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Y lo que es peor: sabemos quién pierde.
Estoy completamente de acuerdo.
Tampoco creo que estemos hablando de presos políticos, pero sí creo que la ausencia de acción del ejecutivo está haciendo desmesurada la actuación del judicial. Estoy de acuerdo en que los tres poderes tienen que moverse acompasadamente porque, la ausencia de los otros dos, convierte en una caricatura la acción del que está ahora liderando la acción que, por cierto, está para otra cosa..
No son presos políticos. No a mi entender, al menos. Pero la desproporción de las medidas cautelares tomadas contra ellos los convierte en algo muy parecido.
Sea como fuere, no es la solución. Ni se parece a la solución. Esta instrucción solo sirve a una causa: la de los que se niegan a entender que el problema es real, que hay mucha gente detrás de él, que únicamente desde la política se puede resolver un problema que es político.
Lo malo es que les sirve muy bien. Y, claro, así nos va.
Un abrazo enorme, José Ricardo. Muchísimas gracias.
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Buenos días. Que nivel para un domingo por la mañana!
¿Alguien ha escuchado una alternativa a estos dos extremos? Yo no. He visto a unos y a otros clarísimamente, a los «defensores de la patria» y a los «presos o exiliados políticos», pero no sé cuál es la alternativa, ni quién la defiende. Ni en la política ni en la calle.
Parece un partido de tenis y lo ganará el frontón Rajoy.
Buen domingo.
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No se conoce que nadie la esté intentando poner en valor.
Nadie la ha ensayado, excepto quizás Iceta, que hizo los únicos discursos razonables en ese pleno de no-investidura y en el previo de investidura fallida.
Pero parece que en estos extremos no cabe la posición política meditada de «negociemos». Los unos y los otros tienen claro que el que no está incondicionalmente con ellos, está drásticamente contra ellos, así que los que no estamos ni con los unos ni con los otros, debemos estar inequívocamente contra ambos. Y ninguna de las dos partes estaría dispuesta a escucharnos.
Puigdemont ya está detenido. Las calles de Barcelona están a reventar de personas que piden su no extradición. Y, no lo olvidemos, todo esto sucede cuando el propio «procés» estaba en sus horas más bajas y el partido del Gobierno también.
¿No mosquea ni siquiera un poco?
¡Qué pena que la izquierda de este país no haya sabido dar la talla en un lío tan grande!
Un beso fuerte, Javier. Gracias por recordarnos esas posiciones alternativas a las que te refieres, ni siquiera se atisban. Ya que negociar no es posible, no hubiera estado de más que, al menos, se hubiera pensado un poco sobre todo esto.
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Perdonadme q reaccione tan tarde pero es que entre semana no doy para nada. Todas las opiniones son respetables desde luego pero quiero explicar porque les considero presos políticos. Se les acusa de un delito de rebelión. Segun el Codigo Penal hay dslito de rebelión cuando hay violencia, vease el caso de Tejero. Sin embargo, por parte del Parlament y del Govern no hubo ni violencia ni siquiera desobediencia. Recordar q cuando se adopta la declaración de independencia, una mera declaración política, al dia.siguiente se aplicó el 155 sin que nadie, repito, nadie opusiera la más mínima resistencia al cese del Govern, la suspensión del Parlament y la ocupación de la Generalitat por.el Gobierno de España. Nadie se resistió ni hubo la más mínina violencia. Si eso es una rwbelión yo soy cura. De hecho ha tenido q hacer malabares circenses para justificar su imputación q nadie wn Europa cree. Por eso Suiza se negó a detener a Anna Gabril y Belgica se opuso a la extradición de.los exiliados. De hecho antes de la detenxión de.Puigdemont en Alemania paso por Finlandia y Dianmarca, q se negaron a detenerlo.
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No puedo estar más de acuerdo contigo en lo que hace al principal delito que les imputan. Yo tampoco veo la rebelión por ningún lado. Y también me parece desproporcionada la medida cautelar de la prisión incondicional.
Sin embargo, no considero que sean presos políticos: sí veo el delito de sedición y también los otros cuantos por los que los procesan, la duración de cuyas penas, sumadas al riesgo (evidente) de fuga y, en menor medida, a la posibilidad de «reiteración delictiva», justifican a juicio del magistrado la medida. (De ahí que no conciba la acusación de prevaricación al juez, ni esté de acuerdo con la consideración de presos políticos, aunque se me parezca mucho).
Dicho lo anterior, insisto en que la prisión preventiva incondicional se me antoja desmedida y, por lo demás, muy muy conveniente a los intereses electorales del partido en el gobierno, que ha hecho dejación de sus verdaderas obligaciones que no eran, también a mi juicio, la aplicación del 155 sino, antes al contrario, buscar las fórmulas de negociación política que hubieran sido necesarias para evitar esta mayúscula crisis.
La Santa Madre Iglesia tendrá sus doctores en un bando y en el otro, pero a mí todo esto me parece una barbaridad inmensa. Igualmente me parece que la cosa de la separación de poderes… como mínimo debe estar en tela de juicio ahora mismo, porque son demasiadas coincidencias las que se dan en este crítico momento del calendario Popular.
Seguimos atentos… ¿Hará Alemania lo que no han hecho Bélgica y Suiza? En un par de meses vemos. Y el lío sigue.
¡GRACIAS, LUIS!
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Puede que tengas razón Justo. Siempre tw consideré una peraona muy juiciosa. De todas maneras, es significativo que hoy precisamente The New York Times en un esitorial recuerda a España y Alemania que Puigdemont nunca usó la fuerza ni la violencia.
Si leeis la prnsa internacional on dareis cuenta el daño que el asunto de Catalunya está haciendo a la imagen de España. El otro dia The Time titulaba su editorial «spain again»
Eso sin mencionar los casos de Pablo Hassel y Valtonic q fueron noticia en the Whasigton Post.
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Es verdad que no sabemos de las repercusiones que tienen estas cosas fuera de aquí, porque no tenemos costumbre de leer prensa extranjera, y estoy seguro de que da mucha luz sobre los acontecimientos. Aporta las demás visiones, de las que aquí se da poca o ninguna cuenta.
Entono en «mea culpa» (muy de estas fechas).
De los ataques a la libertad de expresión, ni hablamos.
Están pasando demasiadas cosas y todas a la vez. Esta involución en la que estamos inmersos llega (como de suyo) a todas partes… Y costará que nos volvamos a sentir formando parte de una sociedad abierta.
Lo malo es que la cosa tiene pinta de ir a durar.
¡Y yo que quería hablar de los exorcistas del Vaticano…!
Un abrazo fuerte, amigo. Seguimos en ello.
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Grreat blog post
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