Hace ya tiempo que vemos en la televisión o escuchamos por la radio campañas publicitarias insultantes promovidas por empresas de seguridad (Securitas Direct se lleva la palma) y probablemente apoyadas por la banca española (el mayor tenedor de viviendas vacías del país), en las que nos advierten de los peligros de salir a la compra por la mañana y encontrarnos a la vuelta la casa llena de okupas muy malencarados que se apoderarán de ella para años y años, mientras libramos una batalla judicial interminable (desde debajo de un puente o instalados en la casa de algún pariente piadoso que nos presta una habitación para los cinco que somos).
Falso de toda falsedad. El allanamiento de morada es un delito que se persigue de oficio, sin necesidad, siquiera, de intervención judicial. Esto es, si alguien allana su vivienda, allí donde usted mora, viene la policía, lo saca a gorrazos sin más trámite y lo lleva a la comisaría por ‘conducción ordinaria’, con la obligación de ponerlo a disposición judicial. De igual manera ocurre con su segunda vivienda, ese apartamento incómodo que tiene en Santa Pola y al que detesta íntimamente acudir cada verano. También tiene la consideración de morada y también okuparlo es un delito de allanamiento que se trata igual que el de la primera vivienda. Si llevan mucho tiempo en su casa, se tratará de un delito continuado de allanamiento de morada, y la cosa sería similar o más grave. Si usted es de los muy afortunados y tiene otra tercera vivienda en la sierra… pues igual: una morada.
El verdadero problema lo tienen la banca, los arrendadores, los ‘fondos buitre’, el famoso banco malo, esto es, aquellas personas (humanas o jurídicas) que poseen viviendas que no son morada de nadie y sobre las que la Justicia es muchísimo más laxa con el okupa cuando este accede a alguna de ellas estando vacía.
De esta forma concluimos que el estado de psicosis que se ha creado gracias a la publicidad y a las fake news, solo beneficia a la banca y a las empresas de seguridad, que viven del miedo de usted y del mío. A la banca porque pretende crear la necesidad de legislar más duramente contra el fenómeno okupa y así ponerle las cosas más fáciles para desalojar sus casas. A las empresas de seguridad porque, ante el pánico injustificado de quedarse uno sin la suya, venden una infinidad de alarmas carísimas que dan derecho a poner un cartelón en la puerta de similar tenor a: “Vivienda protegida por alarma con AVISO INMEDIATO A POLICÍA; si entra se va a cagar”. Un anuncio fake. Otro.
Pues bien, conscientes de que el truco ya no da para más, Securitas Direct ha trabajado su marketing y ha lanzado una campaña todavía más delirante, machista y mentirosa que esta de la que hablábamos.
El periodista Oscar Castellanos, que es la imagen de la compañía desde que esta rompió con Matías Prats, nos advierte de los peligros de nuestra vida como adultos y de los todavía más peligros que acechan a nuestras hijas (entiéndase que se refiere a las hijas de sexo femenino no a un concepto genérico de hija que podría englobar a ambos sexos) que ya van siendo mocitas en edad de merecer. Explica que, a veces, el matrimonio sale de casa con idea de volver de madrugada (imagínese la una o las dos), dejando a su hija rubita y adolescente desprovista de toda protección.

Y nos pone en la situación de que su casa, su morada, podría ser asaltada por indeseables de esos que llenan nuestras calles a las críticas horas, no ya con intención de quedarse a vivir, no, sino con otra infinitamente más perversa: violar a su hija, ultrajarla, sabe Dios si ahogarla en la bañera, para obtener el preciado botín: la tele de 55”que se enseñorea de su salón comedor. Apela entonces a su responsabilidad como padre amantísimo: no sea usted un tacaño hijo de puta que pone en riesgo a lo que más quiere; contrate una alarma Securitas Direct y vaya tranquilo al cine con su señora (el spot publicitario, claro, está dirigido al varoncito) sabiendo que su hija de 16 seguirá intacta a su vuelta viendo una serie de Netflix apta para todos los públicos en el televisor de 55” que continua presidiendo su salón comedor.
Tanta necedad y tan malintencionada ¿será eficaz desde el punto de vista del marketing? Los publicistas de Mi Querido Watson (agencia responsable de la campaña) ¿serán así de imbéciles o tendrán por seguro que los imbéciles somos su público objetivo y, de puro listos, se han permitido el lujo de llamárnoslo a la cara intuyendo que no nos daríamos cuenta? Oscar Castellanos ¿habrá leído el guion del atropello y estará de acuerdo con ponerle su imagen?
No me voy a entretener en buscar el índice de delitos de robo con fuerza en las cosas (asalto de viviendas habitadas por hijas de 16 para robar televisores/año) pero a buen seguro son inferiores a las conexiones de García Castellón con la extrema derecha.
Crear esta nueva psicosis de inseguridad ciudadana es tan irresponsable como la de que nos van a quitar la casa en cuanto nos descuidemos. O aún mayor. Porque quien le quitará la casa en cuanto se descuide será el dueño del banco con quien firmó la hipoteca (seguro promotor de aquella campaña) y no un okupa que tiene que esperar a que el banco le desahucie… y, sin embargo, el violador de su hija puede ser cualquiera que necesite una televisión de 55” con urgencia.
Las irresponsabilidades de tamaña naturaleza deberían estar un poco más controladas por la autoridad competente. Deberían estar tipificadas en el Código Penal como ‘delito de meter miedo a las personas de bien con intención de forrarse’. Y penadas con las del infierno.
Mientras eso sucede (que tardará) vaya usted tranquilo al cine dejando a los niños, incluso a las niñas, en casa si ya tienen 16. Eso sí, como siempre se ha hecho, adviértales de que no deben abrir la puerta a nadie, ni hablar con desconocidos.
Eso le ahorrará mucho dinero en alarmas.
El dibujo es de mi hermana Maripepa.
Estoy en desventaja, no veo la TV por lo tanto no he visto tan delirante anuncio. Los deblacradiob
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Ya estamos con los dedos veloces.
Decía: que los de la radio también se las trae a veces. Hay uno que te promete perder varios kilos en dos días. Estuve en una UCI quince días, con tres agujeros en la garganta y en coma inducido. Perdí exactamente quince kilos. No creo que el método del anuncio sea más agresivo que el mío. Cada vez que lo oigo me dan ganas de llamar a la radio y decir: oiga sabe que significa la palabra ética.
Securitas Direct, hablo de memoria, creo que compartía una accionista con Atresmedia.
También que estaba en medio bancarrota.
Una vez, comentó Javier del Pino, después de entrevistar a un directivo de esa empresa, que éste mismo había dicho que poner una alarma en un piso era básicamente tirar el dinero.
Ahora han proliferado los gestores de arrendamiento con seguro. Eso apesta a caja única y eso, lo sé por experiencia, nunca acaba bien.
Pedirle ética a los vendedores compulsivos es como aquello de las peras y las manzanas.
Una vez, en verano salí de casa para ir a comer a Madrid, dejé ventanas abiertas con el porticón cerrado. Por cuestiones familiares tardé tres meses en volver. Los porticones habían saltado. Los únicos que entraron fueron los gatos. Un chalet en la última calle de una urbanización, donde enfrente solo hay campo.¿Suerte? Posiblemente.
Feliz domingo, abrazos
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Suerte la de vivir en este país en el que los episodios contra los que nos previenen las empresas de seguridad son tan escasos.
A lo mejor en México hubieras preferido dejar las ventanas cerradas… un poner.
Tal como dices, pedirle ética a estas empresas es predicar en el desierto, cuando no jugarte la vida: no iría yo a DESOKUPA a pedirles nada, te lo aseguro.
Las implicaciones de estas empresas con determinados personajes franquistas y populares da muchas pistas sobre quienes son, aunque creo que Securítas Direct, precisamente, está fuera de esas sospechas.
Todo un mundo de irresponsables… de glotones… de avariciosos…
…como en la vida.
Un abrazo enorme, amigo.
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jajajajajajajaja ¡Dedos rápidos!
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Meter miedo siempre ha sido estrategia fructífera. Estrategia basada en la desinformación, la ignorancia, la apuesta más segura. Somos ignorantes y muy vagos para informarnos.
A veces, muchas veces, bastaría tirar de un poco de sentido común para quitarnos el miedo pero ya sabemos que ése es el menos común de los sentidos.
En Política, por ejemplo, se lleva aplicando tan odiosa estrategia desde que a mí me alcanza la memoria. “Que viene el lobo” funciona. Funciona porque en el fondo somos un rebaño de ovejas, asustadizas ovejas, necesitadas de pastores que nos protejan y nos dirijan, nos manden.
Kant decía que el ser humano es el único animal que necesita un amo para vivir.
Cosa distinta es que necesitemos dirigentes que nos representen y velen por nuestros intereses y nuestros derechos, capaces de regular, de legislar e intervenir para evitar esa malicia. Si la primera pregunta que nos viene a la cabeza es “¿cómo es posible que haya gente capaz de hacer tan vil campaña?, la segunda es “¿cómo es posible que se les permita?” En Publicidad tiene que haber unas reglas, como en todo. La tan manoseada Libertad sólo puede moverse entre los límites de la Ética, si no, invade otras libertades o la libertad de otros.
Y conste que en mi familia hemos sido víctimas de los okupas. Cierto es todo lo que dices y estoy de acuerdo pero igualmente cierto es que te pueden ocupar una vivienda que no está siendo utilizada y que la ley, la administración de justicia, mejor dicho, la pésima administración de justicia lo permite sin entrar a valorar las razones por las que esa vivienda no está siendo utilizada. Valora más la “necesidad” del ocupante. Todo esto durante un tiempo, claro está, pero un tiempo que puede ser crucial en tu vida. Y hasta puedo estar de acuerdo en que prime esa necesidad si me la demuestran y me dejan demostrar la mía pero no ocurre así. No ocurre así porque todos estamos dispuestos a mentir, engañar, falsear, lo que sea necesario para aprovecharnos de una situación. Si no todos, muchos. Puedes verte durante años pagando una vivienda de alquiler en Madrid, nada más y nada menos, cuando podrías estar usando la de un familiar que te la cedería con gusto pero no puedes porque otros la han ocupado y, una vez ocupada, alegan una necesidad que podría ser aun mayor que la tuya pero no olvidemos que la casa no es suya.
El problema de la malicia, el engaño, el meter miedo, ya sea en publicidad como en tantas otras cosas, es grave, el problema de no atajarlo desde las instituciones responsables de ello es igual de grave o más, el problema de la vivienda en este país es mucho más que grave, es un desastre que ya estamos pagando y seguiremos pagando por mucho tiempo, sobre todo los jóvenes … y sus padres, que somos nosotros. El problema de los poseedores de ingentes cantidades de viviendas es vergonzoso, indigno de una sociedad mínimamente desarrollada y precisamente ahí es donde se da. Cosas del capitalismo diría Biden.
Pero el problema de los okupas existe. No como lo pinta esa publicidad de la que hablas (yo, como Javier, tampoco la he visto aún) ni como la pintan maliciosamente los interesados en ello pero existe, no lo olvidemos. Es otro problema que hay que solucionar. Claro está que tendremos que esperar a que le llegue el turno, ahora lo importante es encarcelar a un tal Puigdemont y salvar a la patria de su desintegración. Cosas de banderitas.
Saludos a todos los que piensan por aquí.
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Completamente de acuerdo.
A cualquier persona humana le jode que okupen esa casa en la que no vive, pero de cuyo alquiler paga sus facturas, claro que sí. Y claro que el problema existe y es difícil de atajar. Y claro el el precio disparatado de la vivienda agrava el problema.
Lo que no sucede es que sea en tu casa en la que entren, ni que tengas que poner alarmas cuando dejas sola a la niña en casa. Y de ese engaño manifiesto es del que viven estas empresas timadoras, que crean una psicosis de inseguridad que, en realidad es completamente falsa.
España es un país seguro. Desde luego que pasan cosas, como en todos lados, pero es un país seguro. Propagar el miedo, como propagar el odio… debería estar prohibido.
Muchas gracias, amigo. Un abrazo.
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Desde luego . El miedo es muy lucrativo. La publicidad asquerosamente machista. Desde luego NO tengo alarmas. Ahora bien. Han okupado una vez una propiedad mia (la desokuparon los matones) el okupa tiene una tienda de tatuajes.okupa y alquila a otros. Han entrado a robar en todas las casa en las que he vivido ( más de 11 veces) 5 veces en mi trabajo. 3 de ellas estando trabajando. Nunca cierro con llave para que , por lo menos , no rompan la puerta. Entiendo que la gente tenga miedo. Pero tienen que saber .Cuando llegan los «salvadores » LOS LADRONES YA SE HAN IDO¡¡¡¡¡ Se me olvidaba .nunca me han violado. Les ha interesado siempre mucho más la televisión. Y eso que es pequeña. No estoy en la media de las de 16 . Aunque mucho me temo . Que somos muchísimos los perjudicados.Un fuerte abrazo .
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¡Joder, Chelines! ¡Te ha ido fatal!
Es verdad que hay olas de robos y que hay okupas y que la cosa tiene muy poca gracia.
Así, como directamente afectada por tanto vandalismo, no sé muy bien qué decirte; es verdad que pasan cosas… pero la psicosis del miedo no será lo que las arregle, ni creo que se deba permitir generarla.
Una vez que viví en un bajo cuya terraza siempre se quedaba abierta por la noche, entró un ladrón y se llevó un cartón de tabaco ¡¡hijo de puta!! ¡¡Recién comprado!! Comprendí que era mejor cerrar la terraza, pero no se me ocurrió llenar el apartamento de cámaras con sensor de movimiento… (igual que a ti no se te ha ocurrido).
Un beso muy fuerte, amiga. GRACIAS
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¿Un cartón entero? Yo lo mato. Jajajajajaja.
Carambas, Chelines, lo tuyo es mala suerte, rompes toda estadística. Yo creo, como dice Justo (y los datos), que España es un lugar bastante seguro. Dentro de lo que cabe. Ocurren cosas, por supuesto, pero, con poco que sepas del resto del mundo, te das por agradecido.
Eso sí, habrá que ver cómo evolucionan (o involucionan) las cosas. Una cosa lleva a otra, el problemón de la vivienda acrecentará el problema de los okupas, el problema de la pobreza, que empieza a asomar de forma preocupante, llevará a más delitos de hurto, robo, asalto, etc.
Lo peor de todo, y ahí está el asunto de hoy, es que de ello se aprovecharán los mismos canallas de siempre y lo que ahora nos alarma en publicidad mañana lo hará en forma de ley si no andamos despiertos. A algunos les gusta «La purga» pero no como película sino como idea.
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Queridos amigos de pensaba por aquí. Me acaban de comunicar que me han vuelto a robar en mi casa de la playa, Destrozos varios . La televisión ( se veía fatal)y mi increíble moto PUCH mini cross.esto último una putada. Aunque seguiré si contratar ningún servicio de alarmas.espero que lo mío sea mala suerte y no la media de perjudicados.
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¡Jo!
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