Se terminó agosto.
Más tarde o más temprano sabíamos que sucedería. Siempre es así.
Agosto de 2023 cierra un verano negro: quince feminicidios entre los dos meses de vacaciones. Se ve que el calor extremo pone nerviosos a los machitos que asesinan. Un verano para alertar contra los negacionistas de la violencia machista o del cambio climático. Un buen momento para alertar contra los negacionistas en general por el peligro que representan para esta sociedad extraña en que proliferan como por esporas.
Un verano partido por la mitad por unas elecciones generales que se parecen demasiado a las de 2019, en las que nadie parecía contar con los apoyos suficientes para armar gobierno y el arco parlamentario obligaba a pactos hasta entonces nunca vistos en la política española.
Y, sin embargo, funcionaron. Y funcionaron para bien.
Los cinco años de gobiernos progresistas que se suceden desde la moción de censura a Mariano Rajoy, votada con éxito el 1 de junio de 2018, han concluido con un puñado de reformas notables, especialmente notables para las clases trabajadoras y para las mujeres, ello atravesando por circunstancias extraordinariamente adversas que, a pesar de todo, no han conseguido hundir la economía. El propio verano ha dado buena cuenta de ello.
El PP fue el partido más votado. Sorprende, pero así fue. Sorprende porque iban ocho mujeres asesinadas el 23 de julio, cuando España decidió que el partido más votado fuera el que, aliado con Vox, estaba haciendo desaparecer los departamentos de igualdad de las instituciones que gobernaban o retirando los ‘puntos violeta’ de las fiestas multitudinarias.
Luego se hicieron un lío (también era de prever) y consideraron que, habiendo sido la fuerza más votada, tenían el derecho inalienable de presidir el Gobierno de España. Error. Si hubieran hojeado la Constitución ya se habrían dado cuenta. Pero si hubieran hojeado la Constitución sabrían también hasta qué punto es miserable bloquear la renovación de los órganos constitucionales para salvaguardar sus intereses ilegítimos. Así que no hay caso.
El rey hizo su trabajo y, ante la falta de una mayoría clara en el Congreso de los Diputados a favor de ninguno de los dos candidatos posibles, propuso para su investidura al líder del partido más votado (este que se ventila los departamentos de Igualdad y los ‘puntos violeta’): Alberto Núñez Feijóo, pronto Feijóo el breve.
Ya sabíamos que el hombrecillo no es una lumbrera (qué más hubieran querido en su casa o en su partido), pero ignorábamos su infinita capacidad de ponerse en ridículo. Y, en serio, es infinita.
Puede que le pareciera una idea brillante pedirle a Sánchez los votos de su partido para ayudarle a derogar el ‘sanchísmo’, pero créame: no lo fue. No puedo dejar de imaginar al presidente en funciones conteniendo la risa con los ojos hinchados como queriendo salir de sus órbitas. Por lo que se ve le dijo que se tomara lo que quisiera y que mejor dejara de obstaculizar la renovación del Consejo General del Poder Judicial, lo que dio alas a Feijóo, pronto Feijóo el breve, para revolverse contra él y desdecirse de lo dicho hacía apenas unos días sobre la cualidad de partido de Estado del PSOE.
Hacerle mimos a Urkullu tampoco le ha servido de gran cosa. El jefe del Gobierno Vasco le atendió por teléfono durante diez minutos, ocho de los cuales, seguramente, se ventilaron entre saludos y preguntarse por la familia. Decirle ‘mira Alberto, no te hagas líos’, debió consumir no más de los últimos dos y pico.
Lo absolutamente peculiar está siendo su acercamiento a Junts per Catalunya, del que se recuerda ahora como correligionario de la derecha tradicional de este país nuestro y del de ellos, y no le falta razón. Ya se han ocupado, incluso, de decirlo en público, ante el escándalo de Isabel Díaz Ayuso que bien hace esperando sentada en la puerta de la Real Casa de Correos, por si algún cadáver (político) fuera a pasar por enfrente a no demasiado tardar.
Feijóo ha hecho memoria y se ha acordado de que sin el PNV y sin CiU al PP le cuesta mucho gobernar por mucho Vox al que se arrime y no sé de qué manera tratará de convencerlos de que una foto con Vox tampoco es para tanto. Pero ambos se enfrentan en nada a sus procesos electorales respectivos y parece que no les favorece mucho a estas alturas una performance modelo ‘Colón’.

El PP se ha equivocado y, a todas luces, le van a dar una patada en el culo de Feijóo, que mucho ha cacareado de las maniobras de Sánchez para perpetuarse en el poder, pero ahora lo está dejando en mantillas con su estrategia del ridículo.
Nadie más que él quiere una foto con Vox. Y sin Vox no hay foto.
Con quince mujeres asesinadas entre julio y agosto es muy difícil sostener que, según qué alianzas, se hacen en beneficio de España.
El dibujo es de mi hermana Maripepa (y me he descojonado).
15 mujerss asesinadas, ¿ como se corta eso? yo la solucion la tengo facil ¡ah que no vale, como diria el curas de mi pueblo ¡caracoles no habia caido, pues es la solucion la ley de talion , es muy efectiva , pero hombre de dios eso no puede ser, pues mientras no la pongamos em practica no se corta, un asesino mata a una mujer, enajenacion, problemas de drogas, la cuestion es que esa mujer va directa a el hoyo, y ese machito 15 años de relax bien comido y bien bebido, si que esta privado de libertad pero luego llegan los permiso de buen comportamiento y en cuatro dias a la calle , ya ha pagado su culpa el en la calle y ella en el cementerio, y si se tercia voy a por otra que no sale tan caro, vamos a pensarlo bien.
Las cosas del señor Feijoo son entendibles tiene que hacer lo imposible para gobernar por que se juega mucho, si es cierto que tiene mas papeletas para la patada en el culo que para gobernar, pero lo tiene que intentar, por que si no su porvenir esta negro , tendra que recurrir a sus antiguas amistades o no tan antiguas para poder navegar en lancha.
Señor Feijoo espero que los zapatos de la señora ayuso no sean de punta fina, porque si no va a ser jodido.
Buen domingo
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Bueno, lo de la ‘lay del talión’ lo vamos a tener que dejar para la Biblia y algún otro libro de esos de la antigüedad: no queda moderno cortarle la mano al que roba (se empuerca todo) ni matarle al hijo al que mató a un niño… Además, ¿cómo matarle a la esposa al que ya se la ha cargado?
Sobre la pena de muerte ya sabes que discrepamos. Yo ni siquiera estoy de acuerdo con la prisión permanente revisable… no te digo más.
Lo de Feijóo parece que era previsible que el rey lo propusiera y que él hiciera intentos, pero ponerse de esa manera en ridículo le está haciendo más mal que bien. Si ya pensábamos que podía ser bobo, ahora se ha despejado toda duda. Y el futuro que se le plantea… negro, negro.
Tal como dices, esperemos que Ayuso vaya en zapatillas el día que le toque…
¡Un abrazo, amigo!
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Siento no poder estar de acuerdo con el amigo Moraleda. La lex talionis, como su versión bíblica del “Ojo por ojo, diente por diente, pie por pie”, es una barbarie que, por suerte, superamos ya, o empezamos a superar, a mediados del siglo XVIII. Cierto que a veces dan ganas, siempre que algo monstruoso nos afecta nos invade la irresistible sed de venganza. Cierto también que la justicia tiene mucho de venganza y que es principio fundamental de ésta la proporcionalidad del castigo con el daño causado pero si no hubiéramos avanzado en este aspecto … no quiero ni imaginar el mundo en que viviríamos (quema de “brujas”, descuartizamientos, decapitaciones, etc, todo ello convertido en espectáculo público) ¡Qué horror!
Por cierto, yo no he pasado por la cárcel pero tengo la impresión de que no es un lugar tan cómodo como lo pintas.
“Educad a los niños y no habréis de castigar a los hombres” (Pitágoras). Hay que insistir en ello por muchos obstáculos que encontremos en el camino. No hay otra forma humana o humanitaria de mejorar el mundo.
Luchemos contra la violencia de género, hagámoslo sin dudar lo más mínimo, sin dejarnos engañar por políticos oportunistas que pretenden desvirtuar el concepto con la única intención de diferenciarse de sus rivales, sin escrúpulos, porque estos tipos no tienen escrúpulos. No hay más que verlos en campaña subir a un estrado para hablar de los MENA (perdonad que añada por un instante algo fuera del orden del día) en términos de coste, olvidando el concepto: menor de edad (niño) no acompañado. “No acompañado” ¿Por qué llegarán no acompañados? ¿Habrán muerto sus padres en el horrible camino? ¿Murieron antes y por eso emprendieron el horrible camino? Quizá porque vivían en países donde nadie, absolutamente nadie se preocupa por ellos, ni comida ni médicos ni profesores ni seguridad, nada de nada, sólo miseria y una muerte temprana asegurada. ¿Cómo puede alguien que pretende ser responsable público hablar de esos niños en términos de coste, es que no tienen corazón, no hay alma? ¿Y cómo, coño, les pueden aplaudir? ¿Qué nos está pasando? Aceptamos la crueldad sin darnos cuenta.
Dos películas muy recomendables: “Adú” y “La jaula de oro”
Perdonad el paréntesis. Hoy me he levantado más blandito de lo normal.
Feijoo. ¿Y qué va a hacer el pobre? No le queda más remedio que intentarlo de todas las maneras posibles por mucho que haga el ridículo. Pero a esto de hacer el ridículo, a eso del “donde dije digo digo Diego”, a eso de que el que declaré enemigo acérrimo ahora es un posible aliado, a eso de inventarse fórmulas impensables, a todo eso nos tienen más que acostumbrados, todos ellos. Así es la política.
Cuidado, hemos visto de todo, yo me estoy preparando para cualquier cosa.
El ridículo de Feijoo ya no es futuro, ya lo hemos visto, pero ¿y el de otros?
Ya dije antes de las elecciones (aunque casi todos las dieran por perdidas) que podríamos llegar a este momento y entonces: ¿Hasta dónde está dispuesto a llegar Sánchez? ¿hasta dónde estamos dispuestos a llegar nosotros? Difícil papeleta. No sé cuantos capítulos tiene el Manual de Resistencia pero me da a mí que va a necesitar de alguna secuela o continuación.
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Difícil papeleta, sin duda.
Completamente de acuerdo (claro) con tu reflexión sobre los menores no acompañados y quienes los usan sin escrúpulos, fomentando el odio, para dejar bien claro a los odiadores que pueden contar con ellos, aunque mientan en las cifras, que eso lo mismo les da.
Y, en cuanto a la capacidad de Sánchez para ceder, hay que estar a dos cuestiones, La primera, a mi juicio, que nunca debió judicializarse el asunto de la independencia de Catalunya. Otra cosa es que Rajoy no tuviera más imaginación, por lo que cualquier medida que venga a pacificar el conflicto debería ser bienvenida si no fuera porque atacándola se saca más rédito político que asumiéndola y apoyándola, como el PSOE hizo con la aplicación del maldito 155, aunque no estuviera de acuerdo con la decisión (cuestión de Estado).
La segunda es que estamos ante una España tremendamente plural, avocada a cambios en la estructura del Estado que hace mucho debieron acometerse con una reforma de la Constitución que jamás será posible matemáticamente con esta oposición de mierda que tenemos.
Lo digo porque si ponemos la cabeza en la hipótesis (que ni tú ni yo veremos) de una España federal y republicana (me haría cristiano si intuyera que Dios lo haría), nos dolerían menos prendas al intentar comprender que, cesiones hasta aquí impensables, no son otra cosa que la evolución natural de un país que se mueve inexorablemente hacia el federalismo.
Son dos de las razones por las que intentaré siempre entender y apoyar este tipo de decisiones de Estado, por más que las tripas me pidan lapidar al Puigdemont de los cojones antes que hacerle ningún caso.
El problema: ponerles en bandeja cuatro años (o los que la legislatura dure) de gritos, infamias, lemas facilones y traiciones al sentido de la institucionalidad que les faciliten demasiado la siguiente vuelta.
El lema torticero ‘nos rompen España’ debe ser de una enorme eficacia para patrioteros sin demasiadas luces. Llegar a acuerdos de Estado implica cesiones, de las de verdad, a las que el PP jamás accederá.
Solo una oposición digna nos librará de esta pesadilla. El PSOE ya se ha desvelado incapaz de hacer frente a esa forma de hacer política.
Y Feijóo… pues nada, a buscar trabajo. Otros ya lo han tenido que hacer.
Muchísimas gracias, amigo. Un abrazo muy fuerte.
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No es Feijóo quien tiene que desaparecer; es el PP y sucursales a ver si por fin soltamos lastre, que llevamos tres siglos, Borbones incluidos, o quizás sean ellos precisamente el elemento corrosivo, con los mismos retrasando al país. Y a los del alzacuellos y sotana una reducción a lo Pedro Ximenez, cortar el suministro de cash y que paguen impuestos, para variar.
Al Sr Moraleda indicarle que de los quince asesinatos, creo que solo uno, el de Béjar, amenazó con suicidarse y no lo hizo. El resto están muñecos todos o casi todos. Lo triste es que no inviertan el orden, primero que se suïciden ellos. Creo que el ojo por ojo no soluciona nada.
Ese es el problema de esos asesinatos, reflexionando como hombre, que sentido tiene. No me lo explicaba en 2005 y sigo sin comprenderlo.
Puedo admitir que asesines a alguien para obtener un beneficio, robar, una herencia, un testigo peligroso, he leído todas las novelas de Agatha Christie. Son supongo asesinatos por odio, por sentirse humillados, eso no es entendible, asesinar a una mujer por ser mujer para a continuación suicidarse, qué hostias pasa en esa cabeza.
Nos queda un mes de trulla/Feijóo.
Ayer vi un post en X de la alcaldesa de Torrelodones, la que se ha subido el sueldo 6.000 pavos y ha llenado el ayuntamiento de asesores a 40.000€ cabeza, decir que Sánchez está rompiendo el derecho en el Tribunal Constitucional con la història de las papeletas nulas.
No entiendo porqué reaccionan de una forma tan virulenta por revisar unas papeletas, ni que ocultaran algo.
No obstante el cinismo del PP y sus voceros, cada vez que se maneja la palabra juez o tribunal, puede ser peligroso para la salud estomacal.
PD: Mientras escribo estoy escuchando que han asesinado otra mujer en Melilla. Ésto no para.
Al menos llueve, en fin… Feliz domingo, abrazos.
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Terrorismo machista.
Acojonante.
Tan difícil de entender como de erradicar. Infinitamente más difícil que la lucha contra ETA. Y con más víctimas.
¿Negarlo?
Una de las grandes infamias de este tiempo que nos tiene, en el que parecemos habernos habituado a todo. Incluso a votarlo.
16. Y borrando de los organigramas los departamentos de Mujer o de Igualdad allá donde gobiernan.
Por eso les preocupan tanto los votos nulos: los alejan de perpetuar esa sociedad permisiva en la que tan cómodamente instalados estaban. Ese diputado menos convierte en 5 el número fatal.
Acabar con el sanchismo y con los puntos violeta. Demasiado asco para centrarlo solo en el Feijóo este de la estrategia del ridículo. Debe ser el PP y sus sucursales.
Demasiado asco.
GRACIAS, AMIGO. Fuerte abrazo.
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