A lo mejor los papás de los otros niños de la clase les habían prevenido cariñosamente sobre lo inciertos que resultan algunos niños más oscuros.

Siempre con mucho respeto porque, hijo, todos somos iguales: lo dicen los de Naciones Unidas, que son unos señores que viven en América (del Norte). Lo que pasa es que unos somos un poquito más iguales que otros y, a veces, ellos no entienden bien nuestras costumbres… Ellos no son como nosotros, no vienen a nuestros cumpleaños porque no pueden comer medias noches de jamón de York, ni siquiera mortadela, ya sabes.
O sea, que no es que sean inferiores, ni mucho menos. Solo son un poco menos superiores, que no es lo mismo… ¡ni se parece!
Lamine Yamal había ganado a sus 16 años (hoy ya 17) más dinero del que usted y yo ganaremos en toda nuestra vida laboral. Y la cosa no le pintaba nada bien, porque sus papás no vinieron, precisamente, a una Europa de las oportunidades. No llegaron por la zona internacional de la T4, ni su intención era pasar unos días apacibles en la Costa del Sol. Con todo, lo cierto es que un salario anual superior al millón y medio de euros iguala mucho a los niños oscuros. A las personas oscuras en general. Y eso es solo lo que le paga el Barça, que después los jugadores ganan otro pico en publicidad, o en primas y en no sé cuántas cosas más.
A Nicholas Williams le pasa algo muy parecido. Siempre con todo el respeto, Nico Williams es negro de solemnidad. Muy negro. Y, como muchos negros, además, se peina muy raro con unas rastas en punta amarilla nada del gusto occidental. Pero hasta las rastas más acabadas en punta amarilla son del agrado del respetable si lucirlas por los campos de fútbol vale casi diez millones y medio de euros al año. Esos sí que igualan.
No. España no es un país racista. Dejamos que los negros jueguen a pelota. Y, si son buenos en eso, los dejamos llegar a lo más alto. No nos duelen prendas, incluso, para proclamarlos como jóvenes promesas… porque son la excepción. Quedan muchos más negros para despreciar.
El uno es un menor (17 desde ayer) con la suerte de estar acompañado por un padre marroquí y una madre ecuatoguineana, que llegaron a España en patera, y de haber nacido en Esplugues de Llobregat. El otro (22), mayor por los pelos (por las rastas), acompañado también de sus padres ghaneses que, abandonados en medio del desierto por la organización criminal que los acercaba al viejo continente, cruzaron cinco mil kilómetros de desierto a pie, intentaron saltar la valla por Melilla, fueron detenidos por la Guardia Civil y mintieron diciendo que venían de Liberia (en guerra) para conseguir el asilo político.
El uno y el otro saben del terror, pero lo saben de oídas, porque han aprendido que el dinero, si se cuenta por millones de euros, aclara mucho el color de la piel y es un antídoto magnífico contra el miedo.
A veces los insultan en los campos. Eso sí.
Pero el tránsito de negro a rico y el tan diferente trato que reciben los que lo han andado, da fe de cuanto digo: no somos un país xenófobo, no nos dan miedo los negros, ni los húngaros, ni los marroquís. Nos dan miedo los pobres. Aporofobia, lo llaman.
Y eso sí que da asco.
España adora a Lamine Yamal, que metió el gol que nos deja estar esta tarde contra Inglaterra en la final de una cosa importantísima que se celebra en Europa toda con personas de todos los colores y los orígenes imaginables. Aquí si juegan.
Esta es la mañana de hoy. La mañana en la que Vox rompe con el PP por la osadía de acceder al reparto niños negros (casi todo niños, casi todos negros, las niñas negras no pueden hacer ese viaje) que han llegado a la península sin papá y sin mamá, en su infatigable lucha en favor del odio entre las personas.
La misma mañana que Albertito le pregunta a mamá ¿entonces Lamine ya puede venir a mi cumpleaños?
El dibujo es de mi hermana Maripepa
Abascal no piensa asi, los menores no acompañados vienen a España no buscando una vida mejor, no , vienen a violar muchas blancas , a robar a delinquir a todo lo malo menos a lo que realmente vienen, a buscarse un futuro que en sus paise estan condenados a la miseria e incluso la muerte, que alguno delinque y viola es posible, aqui tambien se viola y se delinque y no son los negros por que algunos son muy blancos y muy españoles por que en el caso de la manada no habia ningun negro.
Es muy posible que a los ojos del señor Abascal este señor lamine yamal sea menos negro y se este cambiando a blanco si utiliza mucho el ariel para la var su colada.
Pero esto es asi 120 menores ponen en jaque a 12 millones de Españoles vaya titular , parece un chiste de chiquito de las calzada.
Esta noche seguro que ese negro ya menos negro nos ayuda a ganar la 4ª
Buen domingo de victoria futbolistica aunque le joda a Abascal.
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Solo por eso estoy dispuesto a aficionarme al fútbol, no te digo más.
Tremendo comprobar hasta qué punto llega nuestra ruindad.
El discurso de Abascal (y el de Alvise) llegan a tanta gente… hay tanta gente que descubre que ya pueden hablar en voz alta de su racismo cuando los escuchan que, solo por eso, merece la pena ir con España esta tarde de fútbol.
Si realmente llegaran a la Europa de las oportunidades que les venden quienes trafican con ellos, probablemente no los estaríamos obligando a delinquir…
¡Gracias, amigo!
Feliz tarde de fútbol.
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La madre de Nico llegó a España embarazada de su hermano. Nació en el sistema de salud español gracias a los impuestos. Esos que los ultraimbéciles tipo Milei dicen que no debemos pagar. Desde luego el retorno de esos impuestos ha sido impecable. Sin embargo ese parásito que habla de muros de moros, machetes y violaciones no ha aportado un euro al erario en su vida. Siempre ha vivido del dinero público y eso es salir por una puerta y entrar por otra. Intentó gestionar un bar y terminaron embargandole la casa por no pagar a nadie. Si decir yo soy español español es cuestión de pasta los «pilares de vox» pierden por goleada. Nico y su hermano me recuerdan la película airbag y su lendakari negro. Jeje se creían muy subversivos. Son negros, los insultan en los estadios y lo seguirán haciendo. No importa cuan millonarios sean. Es algo, por desgracia, prácticamente unido al fútbol. Creo que ha sido una dirigente de vox la que se metió con Embappe por su mensaje para votar contra la ultraderecha.
En Gaza Netanyahu sigue exterminando a los palestinos. Nadie mueve un dedo por ellos. Abrazos, feliz domingo.
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¡Negros con criterio!
¡¡Líbranos Señor!!
¿Veremos una Europa verdaderamente mestiza, donde unos y otros curremos, vivamos, nos apareemos, seamos felices?
A lo mejor no… A lo mejor no.
Pero ¡qué bien sienta pensar en ello!
Un abrazo enorme, amigo.
¡Salud!
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Aporofobia, exacto.
¿Cómo van a molestarnos los ricos? Los ricos no piden, ya tienen. Pero los pobres, qué molestos, cuánto piden. Y piden de lo nuestro y eso sí que no. La aporofobia es egoísmo, es lo más alejado de la caridad y la practican los de golpecito en el pecho y misa dominical, los de medallita con crucifijo o virgencita, los que pregonan esa caridad, los fariseos.
Lo peor de todo es que los fariseos ya no se conforman con solo serlo ellos, exigen que lo seamos todos, exigen que lo sean nuestros mandatarios, nuestros presupuestos, nuestras normas. Quizá es que han dado un paso más, quizá han dejado de ser fariseos, hipócritas y han decidido quitar a la caridad su condición de virtud teologal por la que amamos al prójimo como a nosotros mismos. Sí, va a ser eso. Como aquellas monjitas que prefieren negociar por su cuenta, buscarán un nuevo obispo que elimine la caridad, tan incómoda. Y si no lo encuentran, buscarán otro dios, uno que les convenga.
Puede que lo mejor sea mirar la botella medio llena y entender que estos exitosos chavales como Nico y Lamine son un ejemplo de que se puede conseguir. Habrá que empezar por el deporte y el espectáculo e intentar que eso sólo sea el primer paso. Ya vendrán cosas más importantes. Paciencia, ya hemos visto al pueblo francés poner freno a esa barbarie, ahora les toca a sus representantes aprovechar la ocasión y no tirarlo todo por la borda. En UK vuelven los laboristas, otra buena señal. En España se pelean los fariseos entre ellos, a ver si sabemos sacar algo bueno de eso.
Habrá que seguir insitiendo en que los asuntos de la política hay que enfocarlos siempre con humanidad.
Sería la repera que Nico metiera un gol y Lamine otro y ambos se lo dedicaran públicamente a Abascal y al borrico ese que quiere mandar la armada a hundir pateras.
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¡La repera!
Se han quitado la máscara, han recuperado el franquismo como referencia y han escogido el discurso del odio como bandera.
Ahora y puedes ser un xenófobo y gritarlo a voz en cuello. Ya no da vergüenza. Ahora gana adeptos.
¿Lo consentiremos mucho tiempo más?
La intolerancia más absoluta contra la intolerancia. No hay ninguna otra manera de afrontarlo.
Un abrazo fuerte, amigo.
GRACIAS
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Totalmente de acuerdo con vosotros
Aaayyy cuanto cambiaría la cosa si después del mitin racista les soltasen a sus seguidores, «los trabajos que hacen ell@s,ahora los vais a hacer vosotr@s»
Habría espantada general
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Jajajajajajajajaja
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¡¡Deberíamos proponerlo como cierre de campaña!!
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