Si usted está preocupada o preocupado porque el presidente de la patronal estuviera ejerciendo sus funciones como un falso autónomo, o por la nimiedad de que le hayan subido un nueve por ciento su ya abultado salario para llegar a los cuatrocientos mil euros anuales, es porque usted no se ha dado cuenta de que Ione Belarra acudió sin sujetador a un acto de su partido y se dejó fotografiar con los pezones empitonados, ignoramos si por el roce de la camiseta, por el frío, o simplemente porque los tiene.
Como lo oye: el presidente de la patronal facturaba a la CEOE como trabajador autónomo y no llegaba, pobre, a los cuatrocientos mil. ¿No debería agradecer los desvelos de Yolanda Díaz, gracias a cuya pertinaz defensa de los trabajadores le han hecho al fin un contratito indefinido y le han subido el sueldo de acuerdo con el IPC?
Pues cómo serán las cosas que, mientras esto sucedía (lo de su contrato y lo de su jornal), Garamendi se negaba a asistir a una reunión en el Ministerio de Trabajo que tenía por objeto la subida del salario mínimo interprofesional, el tan traído y llevado SMI. ¡Tremendo absurdo (debió pensar él) llenar de dinero los bolsillos de los trabajadores a nuestra costa!
Se aprobó finalmente un SMI de 15 120 euros (1 080 al mes en 14 pagas). Y el presidente de la patronal exclamó: ¡inaceptable!
Esa señora que acude sin sujetador a los actos de su partido y el grupo de secuaces que tiene colados en el Gobierno de España, terminarán por arruinar al país entre unas cosas y otras. ¡Más de mil euros! ¡Inaceptable!
Pero en fin, entre el lío que se ha formado con el tipo este luchando por un salario ‘justo’ para sí mismo; las rebajas de penas a los delincuentes sexuales (estaría bien saber en cuántos meses se rebajan frente al conteo que tan amable y sesgadamente nos facilita Vicente Vallés en cada telediario de Antena3); el chino que le manda globos espía al yankee, el yankee que les dispara; el Constitucional que ha tenido que esperase 12 años (¡12 años!) para tener mayoría progresista y atreverse a bendecir la ley del aborto de Zapatero (¡cómo un Tribunal conservador iba a hacer semejante cosa, a riesgo de granjearse la penas del infierno!); Juan Froilán de todos los Santos de Marichalar y Borbón follando como un mico en un local de intercambios de Madrid porque el abuelo rey le ha dicho que se vuelva con su madre; Renfe comprando trenes que no caben en el mundo, ni por los túneles y deja en bragas las comunicaciones entre Asturias y Cantabria; Abascal (que cada día me recuerda más a Hannibal Lecter) proponiendo a Ramón Tamames como candidato a la Presidencia del Gobierno (¡a la Presidencia del Gobierno! ¡Ramón Tamames!, momificado tras su azaroso viaje desde el Partido Comunista hasta más allá de la derecha tradicional) en la moción de censura nonata que le quieren presentar a Pedro Sánchez; el ucraniano que no hace más que pedirnos aviones para ver si se quita de en medio al Putin este de los cojones que lleva casi un año dando el coñazo de manera persistente (y sangrienta) a sus vecinos; Turquía y Siria desgarrándose en muerte bajo los escombros que dejan los terremotos… En fin, ¡con el puto lio que tenemos!, solo nos faltaba que Ione Belarra se fuera paseando por el mundo sin sujetador.
¡Qué abominación!
No puedo dejar de recordar la profunda reflexión de Manuel Fraga Iribarne (aquel don Manuel de pavorosa memoria, que pasó de ministro del Interior franquista a paladín de la democracia y defensor del estado de las autonomías en un abrir y cerrar de ojos) sobre el escote de Clementina Díez de Baldeón, que era una diputada socialista al Congreso por la provincia de Ciudad Real.
Me viene a la memoria por la similitud que advierto en la derecha del Siglo XXI con la del Siglo XX (corría el mes de octubre de 1997 cuando don Manuel estaba en aquellas disquisiciones). Y lo mucho que se parecen los postulados ideológicos de esta con los vigentes ya en la Alta Edad Media, cuando no se concebía aún el término de ‘oposición política’ o de “igualdad de géneros’ y, sin embargo, la quema de brujas estaba en pleno apogeo.
Así, los debates que nos plantean unos y otros son, por parte de la derecha, la bajada de impuestos, el recurso de inconstitucionalidad contra la ley del aborto y las tácticas disuasorias de Castilla y León, la bajada de impuestos, el escaso uso que se hace de la prenda interior femenina que recoge y realza el busto, la bajada de impuestos y lo de romper España. Y por parte de la izquierda, la más adecuada defensa de la mujer ante los delitos contra la libertad sexual, la subida del SMI, la legalización de derechos individuales, la contención del fenómeno inflacionista.
Y este es el debate, con sus más y con sus menos. Incluso con los enfrentamientos entre los socios de Gobierno. Incluso con la contumaz solidez del discurso que la derecha esgrime (sin verbalizarlo abiertamente) contra el servicio público y las libertades individuales.
¿Alguna duda sobre quién es quién?
Yo se la despejo: Ione Belarra es una mujer.
El dibujo es de mi hermana Maripepa.
Pensaba por aquí 
Ione esa muchacha que presume de pechos, siendo un poco mas jovencita junto con la montero salieron totalmente destetadas presumiendo de las mismas en una manifestacion contra la prostitucion , ( por cierto en esa foto gana montero) chicas muy majas , no tanto como el señor de la ceoe que dice pan para mi que los santos no comen o no tienen derecho a comer la eterna historia de la derecha, hay un dicho que dice aunque seas malo no faltara alguien que llegue y te haga bueno, posiblemente este sea el caso del señor Fraga Iribarne (al que las malas lenguas llamaban la mecedora)
el señor abascal se lo esta currando para superarle pero por mucho , no nos extrañemos, estos señores son asi ya los conocemos, solucion mandarlos a su casa y que trabajen para ganarse el sueldo como los demas ¿por cierto me gustaria saber que es de aquel señor llamado Casado? ¿ esta trabajando por cuenta propia o ajena? ¿ o se le ha acoplado en algun sillon de algun despacho inservible?
buen domingo.
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No tengo yo tan claro que la señora en cuestión pretendiera presumir de nada, pero la historia que nos recuerdas de la mani contra la prostitución viene a dejar claro que las personas pueden hacer con sus tetas lo que les venga en gana, independientemente de su militancia.
El pudor igual es un lujo que hay quién no se puede permitir.
Don Manuel, ay, don Manuel… es verdad que Abascal lo deja como una monjita, pero… ay, don Manuel, despreciando a una diputada como si del mismo León de la Riba se tratara… y, seguramente, abrazando a los ‘garamendis’ del mundo, aunque en este caso no le llegara a dar tiempo. Y Garamendi, el poseedor de la cara más dura del panorama empresarial, subiéndose el sueldo a 400 000 y negándose a firmar el SMI por 1080 al mes… ¡Cosas!
Y ¿Pablo Casado? …El pobre… ¿Qué será de él? Ni idea. Espero que tanta paz lleve como tranquilidad le dejó a la Ayuso, porque el resto de los españoles no hemos ganado nada.
Abrazo, amigo
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Es culpa de Sánchez que no es capaz de poner orden dentro de esa coalición ilegítima que se ha montado.
No es capaz de imponer ni siquiera el recato entre sus filas, seguro que algún ministro, incluso, va sin calzoncillos a las deliberaciones del Consejo de Ministros y, claro, ante tanta carne suelta, es imposible estar en lo que se debería estar que es abandonar La Moncloa y dejarnos a nosotros que gobernemos este país.
La verdad es que noticias así, quiero decir que se de importancia a este hecho no mueve nada más que a la sátira…..o pone una piedra más al desencanto.
El terremoto no va más allá, en la mayoría de las conciencias, del tiempo de un telediario, lo de Garamendi lo asumimos con la naturalidad de que son cosas que pasan, igual que las ganancias infames de las petroleras y toleramos que un Vox desatado nos amenace con una momia para gobernar este país.
En eso estamos, amigo, cavando cada vez que creemos haber tocado fondo.
Un abrazo
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¿Crees de verdad que irán sin calzoncillos al Consejo de Ministras y Ministros? ¡ANATEMA! ¡Eso sí que no, eh!
Garamendis y abascales, petroleras y corporaciones bancarias, mandan hoy y van a mandar siempre, me temo. No alcanzarán el Gobierno (¡Dios no lo permita!), pero seguirán siendo los dueños del dinero y, por lo tanto, de la opinión, aunque cueste un tanto reconocerlo así.
La grey se apacigua con toros y pezones y el resto lo damos sumisamente por bueno.
De verdad, amigo, que uno no sabe si hacerse definitivamente de derechas y dormir el sueño de los justos (haciendo pompitas) en la tranquilidad de que a nuestras ministras nunca se le pondrán duros los pezones.
¡Qué hartura, tú!
¡Pero qué hartura!
Abrazo enorme, Ricardo
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Hace mucho que no escribo por pura desesperación, en cada artículo me entran ganas de ponerme a soltar improperios y para qué. Éste es un lugar de confort y lo de mal de muchos consuelo de tontos no me ayuda.
Hoy escuchaba en un programa de radio, Código de Barras, que los jóvenes ahora recibir una llamada telefónica les produce una crisis de ansiedad. Los que tenemos una historia detrás, hemos aprendido muy bien que es el derecho a no contestar; levantábamos el teléfono sin saber que habría al otro lado. Parece que ese alto nivel de capacidad de informarse les hubiese aplastado.
Quizás eso explique que tú enumeres un listado de despropósitos y lo que flota y queda al final son los pezones «con las largas puestas» de una política «roja» que siempre es y será un agravante.
No veo los informativos de Vallès, estimo más mi salud, cierto las rebajas de condenas se están aplicando sobre las penas mínimas. Lo que no me explico porqué un juez aplica la pena mínima a un violador.
Un ejemplo: Lleida, los mossos d’Esquadra avisan que la ley del si es si ha puesto en la calle a un peligroso violador. Bien, ya la tenemos liada, un fulano que ya violaba cuando era menor de edad, con siete violaciones en la chepa, resulta que al fulano le habrían soltado en el més de julio. De verdad un juez puede condenar a ese violador, que no se va a rehabilitar nunca, a una pena mínima. Que tiene en la cabeza ese juez o jueza ¿Porno? Hay que preguntarle a que dedica el tiempo libre.
Solo el concepto de penetración ya es un agravante, la propia palabra lo dice: penetración, invasión de un lugar ajeno. Lo mismo que hace Putin en Ucrania.
Podemos resignarnos, en tiempos de Fernando VII «el deseado» los canales de información funcionaban de forma diferente, eso permitió a ese inútil corrupto hacer lo que le dió la gana, atrasar y arruinar al país.
Eso, en teoría, ahora no debería pasar y sin embargo… Nos ponen delante dos pezones y nos tapa el sol de la verdad.
Feliz domingo, abrazos.
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¡Se te echaba de menos!
Tengo la sensación de que lo de ‘penetrar’ es lo que nos hacen todos los días en la inteligencia cuando vemos los titulares de los noticiarios. A más es difícil llegar, aunque me confieso adicto a los informativos y casi siempre los termino atado a la silla.
La metedura de pata de la puta ley del ‘sí es sí’ la van a ordeñar hasta secarla y le sacarán partido. Y los jueces (que afortunadamente no eligen a los jueces -todavía-) seguirán haciendo de su capa un sayo sin más contención que la del Tribunal Supremo este que controlan por la puerta de atrás en su Sala Segunda, según ellos mismos.
Parece que estamos destinados a luchar contra el asco. Vencer el asco. Este parece nuestro ‘late motiv’ en este tiempo donde todo lo que pasa se concentra los pezones de la ministra.
Vencer el asco.
Un abrazo, amigo. Gracias por volver.
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Retrógrados. Ya hace tiempo que pasó de moda la palabreja. Cuántas veces, en nuestra juventud, recurrimos a ella para referirnos a los viejos reaccionarios criados en el puritanismo del franquismo que, aterrados por el “grosero” mundo que se les venía encima, arremetían contra todo lo nuevo porque todo lo nuevo les escandalizaba (minifaldas, biquinis, pezones, qué más da) y aprovechaban para sermonearnos sobre la diferencia entre libertad y libertinaje. Y no lo hacían en balde, trataban de confundir y, con ello, despreciar las libertades, emborronarlas, tildarlas de sospechosas, pintarlas con los tonos más oscuros, más negativos. No lo consiguieron entonces y sin embargo son muchos de aquellos jóvenes los que ahora se han convertido en aquellos viejos reaccionarios y los más cucos lo saben. No deja de sorprenderme la fuerza del populismo, qué fácil resulta emborronar lo importante, garrapatear hasta que no se entienda, centrando la atención en nimiedades engrandecidas hasta que no se vea otra cosa.
Este es un país de viejos y la vejez te hace reaccionario.
La juventud … puf. Atontados. Miedo me da su ignorancia, pánico su desidia.
Garamendi, un hijo de puta más, ya hemos conocido a muchos.
Vallés, un vendido más, ya hemos conocido a muchos.
Abascal, un parásito más, ya hemos conocido a muchos.
Froilán de todos los Antros, puaf, qué más da.
Ramón Tamames, jajajajaja, Ramón Tamames, jajajajajaja. Me atraganto de la risa.
Gracias por seguir ahí, advirtiendo.
Y gracias a Maripepa. Me encanta. Y noto a Olana
ciertamente favorecida. Jejejeje
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La fuerza del populismo. Esta es la clave. O así lo veo yo. Una masa enorme de personas dispuestas a creerse aquello que les cuente su cuñado con la sola condición de que sean ideas ya procesadas que no necesiten de análisis alguno.
Y, entre tanto, fabricando una moral de mierda, apestada de prejuicios y de convenciones de otras épocas.
Populismo. Del más soez. Del más efectivo.
Un abrazo, amigo.
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Perdón, quería decir Ione, lo de Olana hubiera sido la hostia.
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Jajajajajajajajajajajajaja
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